Ventanas deseadas III
No me importaría asomarme durante algún tiempo a cualquiera de las ventanas de los camarotes del Nero, un yate que es sinónimo de belleza y lujo. No es algo imposible, está a la venta y puede alquilarse por semanas, a mi ahora no me viene bien, pero quizás algún día podríamos hacer una quedada de esas de blogueros colegas y pagar a escote; sólo tiene capacidad para alojar a doce pasajeros en seis suites, pero igual hablando con el dueño nos deja poner unos sacos en la biblioteca, no sé, es cuestión de plantearselo.
....tu y tus ilusiones,es cuestión de "master card"
ResponderEliminarvale!! yo me traigo los tupers tu las birras!!!
ResponderEliminarY dónde dices que hay que apuntarse?
ResponderEliminarWEndy!!!! Un besasazo
ResponderEliminarLo de apuntarse... pues mejor hacemos algo informal, lo tomamos al asalto y listo, los gusanotos y la fanta de naranja los llevamos nosotros, eso si, que no se diga..